Una de las imágenes que más asociamos con Nueva York son los taxis amarillos. Forman parte de la escena urbana de la ciudad. Tal vez porque llevan circulando por esa gran urbe pintados con ese color desde 1969. Por su aparición en el cine y la televisión se han convertido en símbolos de la Gran Manzana. Lo mismo sucede con la joyería Tiffany, ubicada en la Quinta Avenida, por la película Desayuno con diamantes, protagonizada por Audrey Hepburn. Tal vez por eso, la marca ha lanzado un reloj con forma de taxi neoyorquino de los años 50: Tiffany Taxi, una joya a tenor de su precio de 52.000 dólares, una cantidad muy superior a la de los taxis convencionales.
Este objeto pertenece a la colección Time for Speed de la firma joyera, que anteriormente también ha lanzado otros modelos vintage similares. A simple vista su apariencia no delata que estamos ante un reloj. Cómo no, coloreado en el clásico azul turquesa propio de la marca (Tiffany Blue), bajo ese aspecto retro esconde un complejo y preciso mecanismo. Integra dos movimientos, con uno indica la hora y los minutos (se encuentra encima del motor del taxi como dos discos giratorios de acero inoxidable) y con otro impulsa el motor (se activa con una tecla en el salpicadero). Y para ajustar la hora, basta con mover el volante en dirección contraria a las agujas del reloj. Mide 14 x 18,7 x 47 cm y pesa 5 kilos.
La pieza está montada a mano en aluminio y lleva una placa placa dorada y azul con la inscripción “NY-727”, en referencia al número de la calle de la tienda de la Quinta Avenida. De momento puede adquirirse en este establecimiento, insignia de la marca, conocido como The Landmark.
Otras obras maestras de la colección Time for Speed
El año pasado, la marca lanzó dos relojes Time for Speed Tiffany de edición limitada, también de aluminio y acero inoxidable y el color característico de la casa, inspirados en los coches de carreras de los años 50. Uno de ellos con 316 diamantes (19 quilates) y un precio de 215.000 dólares, el otro sin ellos por 40.000 dólares. El primero lleva engastado un único diamante tallado por expertos en el centro de cada rueda, mientras que varias filas de pavé de diamantes detallan el bisel y la placa de grabado del reloj.
La colección rinde homenaje a la herencia de la casa de expertos relojeros suizos y trofeos de carreras hechos a mano. Las llantas de caucho incorporan radios y llantas de acero inoxidable pulido. La hora se muestra en una ventanilla del lado izquierdo. El número cinco estampado por la parte delantera es un guiño a la Quinta Avenida. Y como el de este año, el volante funciona como la corona del reloj, e igualmente se ajusta con un movimiento en el sentido contrario a las agujas.
Volviendo a los taxis de Nueva York, no es la primera vez que Tiffany los tiñe de azul: para el lanzamiento de productos suele adornar la ciudad con ese tono y en 2018 pintó de ese color semáforos, kioscos y otros espacios públicos y algunos yellow cabs durante unos días por la presentación de la colección de joyas Paper Flowers. Iniciativas que refuerzan a la compañía, aún más, como icono de esta gran urbe.
