Las calas y playas vírgenes son el atractivo más conocido de Menorca (94.300 habitantes), pero la isla de la calma, de la naturaleza y de la vida lenta es mucho más que sus arenales de ensueño. Actividades en contacto con la naturaleza, deportes al aire libre, gastronomía con personalidad propia, artesanía y productos ligados al territorio, así como una infinidad de propuestas culturales, hacen de la isla balear -la segunda en extensión del archipiélago- un relajado destino de calidad durante cualquier época del año. Aquí se inventó el lujo tranquilo.
Apacible y serena, pero también fuerte y enérgica, a lo largo de su historia ha sufrido los avatares de múltiples conquistas e invasiones que le han dado un marcado carácter cosmopolita. Esa huella se percibe aún en el Castillo de San Felipe (s. XVI), una de las fortalezas más antiguas de España. Diseñado para defender el puerto de Mahón, el castillo fue asaltado por ingleses y franceses tras las sucesivas conquistas de la isla, hasta que retornó definitivamente a España en 1802. Desde 1998, las ruinas de este baluarte son gestionadas por un consorcio que ha permitido la recuperación parcial de las galerías subterráneas.
Por fortuna, el próximo asalto al castillo no irá ligado a ninguna guerra, sino al ocio y a la diversión con un exclusivo toque mediterráneo: del 27 de julio al 8 de agosto, el Castillo de San Felipe acogerá la II edición del Lazareto Music & Gastro Festival que contará con actuaciones de 13 conocidos artistas -desde Anastasia a The Christians pasando por Sara Baras– y la exquisita cocina del chef Paco Pérez, cuyos restaurantes, Miramar y La Enoteca, ostentan dos estrellas Michelin cada uno. El menú gastronómico se servirá cada noche, antes del concierto, y constará de siete platos, incluyendo entrantes, principales y postres. Pero el festival también contempla opciones culinarias más informales: en las mesas bajo reserva, sobre el acantilado y zonas ajardinadas, se servirán los platos del cocinero de Menorca Víctor Bayo, a lo que hay que sumar una veintena de puestos de street food.
Menorca, el lugar idóneo para un festival
La isla ha vivido una importante transformación en los últimos cinco años con la apertura de nuevos hoteles, galerías de arte y restaurantes. Por eso la fundadora del festival, Miriam Mateu, con una larga experiencia en la organización de eventos, vio el momento de dar forma a un proyecto que desde el principio aspiraba a convertirse en una experiencia única. “Hemos sido pioneros en Menorca en la apertura al gran público de la Isla de Lazareto, que dio nombre al festival, y ahora lo somos en la recuperación y apertura del recinto del Castillo de San Felipe. Ambos son lugares excepcionales por su belleza y valor histórico”, afirma la promotora, que se inspiró en la amplia tradición cultural y musical de la isla para lanzar su iniciativa. Durante el siglo XVIII ya se representaban con cierta frecuencia espectáculos de ópera y teatro en el Teatre Principal de Maó.
¿Cuáles son los elementos diferenciadores del Festival Lazareto? “No es un festival al uso; es una experiencia global que aúna música, gastronomía y cultura en un entorno excepcional al aire libre”, responde Mateu. “En el apartado estrictamente musical hemos puesto el foco en artistas icónicos de todos los tiempos. Las décadas de los años 80 y 90 fueron muy prolíficas en grupos musicales como Village People, Boney M o Tony Hadle (el cantante del Spandau Ballet) que han sabido mantenerse y crear interés hasta nuestros días. Sus hits los hemos y cantado y bailado todos. Pero también contamos con artistas actuales como Antonio Orozco o Chambao que son referentes de la música española”. El aforo máximo permitido en “el festival más exclusivo del Mediterráneo” es de 2.500 personas diarias. Un público nacional e internacional “de alto nivel cultural, que busca experiencias de calidad, que valora la historia y lo inusual del entorno y quiere disfrutar al aire libre de momentos únicos”.
Que la producción se realice en un recinto histórico -más aún si está rodeado de naturaleza- repercute lógicamente en la logística y el presupuesto final. “Si el año pasado la inversión total fue de unos 1,6 millones de euros, la de este año rondará casi los 1,9 millones, ya que hemos destinado una parte del presupuesto en limpiar y recuperar edificaciones del complejo”, señala la fundadora del Lazareto Music & Gastro Festival, y recuerda que el año pasado el impacto económico directo fue de más de 800.000 € por la contratación de proveedores locales.
Teniendo en cuenta que Menorca es Reserva de la Biosfera desde 1993 y que el castillo está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), la organización ha contemplado medidas de protección medioambiental que pasan por restringir la contaminación lumínica, el reciclado de materiales o la fabricación de vasos rellenables propios para evitar los de un solo uso.
GUIA PRÁCTICA
- Cómo llegar:
Los asistentes podrán acceder con su propio vehículo y dispondrán de parking en Es Castell donde un paseo de 15 minutos les llevará al recinto de San Felipe. También se podrá reservar plaza en los parkings cercanos al festival o en el propio recinto.
- Dónde Alojarse:
Villa Le Blanc Grand Melia, Son Blanc Menorca, Vestige Collection
- Dónde Comer:
Ses Forquilles: San Fernando, 12. Mahón. 971 353 260
Sa Pedrera d’es Pujol: Camí des Pujol, 14. Torret, Sant Lluís. 971150717
Sa Llagosta: Carrer de Gabriel Gelabert, 12. Fornells, Illes. 971 376 566
- Galerías de arte: