Guerlain Les Extraits, una oda a la Guerlinade

Perfumes

Guerlain Les Extraits, una oda a la Guerlinade

El frasco octogonal de la última colección de extractos de la maison se inspira en uno de finales del siglo XIX.

Guerlain presenta su más reciente colección de fragancias, Les Extraits, dentro de la distinguida línea L’Art & La Matière. La creación de estos exquisitos perfumes ha sido posible gracias a la emblemática Guerlinade, un arte olfativo transmitido a lo largo de cinco generaciones de perfumistas. La esencia de esta firma se articula en torno a seis preciadas materias primas: vainilla, rosa, bergamota, lirio, haba tonka y jazmín.

Cada perfume, cuidadosamente seleccionado y altamente concentrado, ha sido transformado mediante conocimientos especializados y mezclado en base a formulaciones exclusivas. Cada materia prima de Guerlain se distingue por un número de oro, del 6 al 75.

Inspirado en el icónico frasco cuadrado de Guerlain de finales del siglo XIX, Les Extraits Signature en la línea L’Art & La Matière se presenta en una elegante versión dorada. Disponible en formato de 50 ml, conserva su vaporizador para garantizar una difusión óptima de los seis extractos. La manufactura de estos frascos corre a cargo de Pochet du Courval, históricos fabricantes de vidrio para la maison desde 1853. Es un envase octogonal, con sus característicos bordes.

Todas las fragancias están ya disponibles en las boutiques Guerlain por un precio de 550 euros cada frasco.

Los seis extractos Guerlain

En la imagen superior, frascos con materias primas empleadas en los perfumes de la colección de Les Extraits. Sobre estas líneas, la fragancia Iris pallida (extracto 6), con lirio, almendras y almizcle.

Iris pallida, el extracto 6, se basa en la elegancia amaderada del lirio de Guerlain Iris. Rebosante de manteca de lirio exclusiva de la maison, la suavidad envolvente de este ingrediente se intensifica. Con el fin de elevar el aroma a su máxima expresión, los perfumistas de Guerlain han envuelto la materia prima en esencia de almendras y notas de almizcle. 

Esta fragancia prolonga su estela con una nota de cuero similar al ante blanco, recubierta por la textura cremosa del sándalo. Jacques Guerlain exaltó por primera vez en 1906 la manteca de lirio Iris Pallida, con Après l’Ondée. Este lirio particularmente polvoriento, que alcanzó el reconocimiento internacional en 1912 con L’Heure Bleue, se ha convertido en todo un emblema de Guerlain.

Rose centifolia, el extracto 1, apuesta por el poder floral y amaderado de la rosa de mayo. Esta flor posee un poder de atracción extraordinario, orquestado por sus notas afrutadas y melosas. Y florece de diferentes formas: un agua de rosas, una esencia de rosa Damascena de Bulgaria y un rosa Centifolia de Grasse, que revelan toda la riqueza olfativa de la flor. 

Rose centifolia (extracto 1), una propuesta afrutada que aúna distintas sustancias basadas en rosas.

En las notas de fondo, nubes de incienso y pachulí intenso aportan misterio y profundidad a la reina de las flores. De origen francés como la propia firma, la rosa de mayo forma parte de la esencia básica de Guerlain. Con un aroma rico y afrutado, se incluye en varias de las fragancias de la maison.

Vanille planifolia, el  extracto 21, juega con la exquisitez amaderada y ambarina de la vainilla. Esta es llevada al límite y enriquecida con la icónica tintura de la firma. Así, la exquisitez de la vainilla se impregna de ese je ne sais quoi característico de Guerlain. La composición expande su estela con una nota de mirra y almizcle blanco, todo ello envuelto en la famosa opopanina, el legendario acorde ambarino de Guerlain.

Frasco de la fragancia Vanille planifolia, con notas de mirra y almizcle blanco (extracto 21).

Bergamote fantástico, el extracto 11, coloca en primer plano la intensidad verde y ambarina de la bergamota. Esta desprende frescura y deja tras sí una estela ambarina. Los perfumistas han experimentado con la bergamota con el fin de elevar su aroma e intensificar su faceta verde con el petitgrain, la esencia fundamental de la hoja de bergamota. 

Para preservar y mantener este material, la ambarina opopanina se fusiona con las facetas ahumadas de la esencia de madera de guayaco. La bergamota ha sido elegida históricamente por la firma para aportar frescura a sus fragancias.

En un envase octogonal, el extracto 11, Bergamote fantastico, que desprende frescura.

Jasmin grandiflorum, el extracto 30, toma como punto de partida el jazmín. Se percibe junto con notas de salida de fresa y sándalo. En el corazón, el jazmín de la marca se realza para la ocasión mediante dos procesos innovadores: extracción de CO2 y de microlíquidos.

En Guerlain, esta flor se interpreta como comunales de orígenes. Herencia del fundador de la maison, el arte de lo comunal es un método secreto que consiste en mezclar ingredientes de diferentes fuentes y cosechas, en particular de Grasse, en Francia, y de Calabria, en Italia, para garantizar una calidad duradera.

Jasmin grandiflorum, extracto 30, se inspira en el jazmín combinado con toques de fresa y sándalo.

Tonka sarrapia, el extracto 75, coloca en el centro al haba tonka. Se ha enriquecido con esencia de almendras amargas y una microdosis de cumarina. Llevando su embriagadora esencia hasta el límite, el haba Tonka se mezcla con la vainilla, el cacao y otras especias. 

La cumarina, naturalmente presente en el haba Tonka, fue presentada por primera vez por Guerlain en 1889. El visionario Aimé Guerlain creó Jicky utilizando esta molécula sintética para fortalecer la potencia olfativa natural del haba Tonka y exaltar su suntuosidad. Así nació la primera “fragancia moderna”.

El extracto 75, Tonka sarrapia, con el haba tonka como ingrediente principal y esencia de almendras amargas y una microdosis de cumarina.