Ibiza es para muchos el mejor destino para relajarse, disfrutar del verano, desconectar del mundo y conectar con uno mismo. La isla ofrece oportunidades únicas, como practicar deportes acuáticos en las mejores calas y bahías. La Playa de Talamanca es uno de esos lugares que permanecen en la memoria de quien lo visita, en parte, gracias al restaurante Almar.
El reconocido restaurante mediterráneo, anteriormente conocido como El Barco, repite por segundo año consecutivo con Toni Boix, uno de los actuales gurús de la restauración valenciana, cuya exquisita carta de arroces lo consolida como un referente gastronómico en la isla. Además de la clásica carta, que incluye platos como el arroz con bogavante de Formentera o el sabroso bullit de peix, este año como novedad incorpora una barra especializada en alta cocina japonesa con un ticket medio de 70 euros.
Este pop up de BĪCHI, término que significa “playa” en japonés es heredero del madrileño Asiakō. Está dirigido por el joven chef canarión David González, formado en la Escuela de Hostelería Hoffman (Barcelona) y con una destacada trayectoria a sus espaldas. Sus doce años como jefe de cocina en Kabuki Wellington, el reconocido templo del sushi en Madrid, bajo la dirección de Ricardo Sanz, le avalan como uno de los chefs punteros en la especialidad.
González combina un profundo conocimiento de los ingredientes con su dominio de la cocina tradicional japonesa, aportando su toque canario y un guiño a las Baleares. En su propuesta culinaria, el chef sorprende con una interesante fusión de sabores y tradiciones. Como resultado de esta múltiple fusión, sus platos incluyen ingredientes autóctonos como el mojo picón y el mojo verde, recetas familiares que ya elaboraba su madre. Pero también se aventura a incorporar elementos emblemáticos de las Islas Baleares, como la sobrasada y la miel de Formentera, en una combinación tan armoniosa como apetecible.
Este espacio efímero, exclusivo durante la temporada de verano, cuenta con una barra con cocina vista en la que el equipo prepara las especialidades japonesas frente al comensal, con un total protagonismo de la parrilla. Así, los amantes de arroces clásicos y pescados podrán sentarse a la mesa con los adeptos al mejor sushi y a las brasas, un concepto inédito en la isla de Ibiza.
La carta ofrece multitud de platos sorprendentes, como los tartares, entre los que destacan el de atún semipicante o el de salmón y aguacate con aliño de trufa blanca. También cobran importancia las ostras con salsa ponzu y tajín mexicano, y el sashimi de atún o salmón. Destaca su selección de nigiris fusionados, como el de vieira flambeada con sobrasada y miel de Formentera, el de guanciale con caviar, el de king crab con mayonesa de kimchi, el de salmón con lima, el de atún con salsa ponzu o el de sirvia ibicenca (pez limón) con mojo canario y una mezcla de especias japonesas picantes.
El núcleo central de BĪCHI este verano reside en su irresistible oferta a la parrilla. Comenzando con los entrantes, destaca el nasu kamu, una berenjena con salsa miso que adquiere un delicioso sabor ahumado gracias a la madera y el carbón utilizados en la parrilla. Además, se pueden disfrutar de alcachofas a la brasa con guanciale y sichimi fresco, así como una parrillada de verduras con chimichurri japonés, que ofrece una explosión de sabores. Los mejores pescados también tienen su lugar en las brasas de BĪCHI, que llegan desde las lonjas más destacadas del país, incluyendo por supuesto la propia lonja de Ibiza. Entre las opciones destacan la dorada a la parrilla con vinagreta de yuzu, el pez limón a la parrilla con salsa de mantequilla y el tataki de atún rojo con tirabeques y salsa teriyaki.
En cuanto a las opciones de carne, BĪCHI ofrece sus brochetas a la parrilla, como la clásica yakitori con pollo ibicenco de pagès. También se pueden saborear mollejas de ternera en estilo japonés, cortadas en tataki, además del entrecot, que se sirve con espárragos trigueros y panceta estilo chino, cocinada en dos tiempos: primero en miri, sake y soja, y luego terminada a la parrilla.
En resumen, BĪCHI ofrece una experiencia culinaria única en Ibiza centrada en la parrilla en la que cada plato demuestra una cuidadosa selección de ingredientes y una habilidad culinaria excepcional.