Finolhu: el paraíso libre de plástico en Maldivas

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Finolhu: el paraíso libre de plástico en Maldivas

Ubicado en plena reserva de la biosfera, combina turismo de lujo y activismo medioambiental.

La definición de paraíso se encuentra en Finolhu, en el atolón Baa de las Islas Maldivas. Un refugio solo para privilegiados en una zona declarada reserva de la biosfera por la UNESCO dada la excepcional vida marina que allí se concentra.

Conscientes del tesoro que habita en este rincón perdido y olvidado del mundo, el resort desarrolla numerosas acciones que contribuyen a la protección del hábitat mediante estrategias sostenibles, colaborando con diferentes organizaciones ecológicas y ofreciendo apoyo a la comunidad local.

Dentro de ellas, Finolhu está involucrado en el desarrollo de un proyecto de restauración de corales cuyo objetivo es colocar fragmentos rotos en las aguas poco profundas de la laguna y trasplantarlos cuando hayan crecido. Algo en lo que los viajeros podrán muy pronto ser protagonistas: “A finales de año iniciaremos un proyecto de reforestación de corales en el que los huéspedes pueden participar”, asegura su Director General Marc Reader.

Plano aéreo de Seaside Finolhu
Se trata del primer resort alemán de cinco estrellas en la tierra de los atolones. Su playa, de más de dos kilómetros, es la más larga de las Islas Maldivas. Foto: Finolhu.

Fuera plásticos

El hotel está comprometido, además, con la erradicación de los plásticos de un solo uso, una acción que han puesto en marcha en colaboración con Parley for the Oceans a través de la estrategia AIR (Avoid, Intercept, Redesign). “Todos los plásticos que llegan a nuestras costas pasan por un proceso de segregación”, explica Marc Reader. “Los plásticos PET (tereftalato de polietileno) se trasladan a la sede de Parley en Malé, y se envían a la fábrica de Adidas en Taiwán para ser rediseñados en artículos funcionales como zapatos y ropa”.

Y añade: “Incluso contamos con nuestra propia planta de embotellado, lo que muestra aún más nuestro compromiso con la protección del ecosistema de Maldivas. Y somos un complejo libre de plásticos de un solo uso: nuestros restaurantes han pasado a utilizar pajitas biodegradables y contamos con artículos de aseo sin plástico en nuestras villas para huéspedes, como botellas dispensadoras rellenables para champús, acondicionadores y jabones corporales”.

Seaside Finolhu en las Islas Maldivas
El lujo es tener una gran variedad de opciones. Por eso, Finolhu está compuesto por 125 villas privadas completamente exclusivas y cuatro restaurantes. Foto: Finolhu.

El resort colabora también activamente en proyectos de educación ambiental, apoyando a las comunidades locales con iniciativas que mejoran los sistemas de eliminación de residuos. Así se ha hecho en la isla de Hithadoo, de la que proceden muchos de sus empleados.

“En Finolhu Baa Atoll Maldives, nos sentimos orgullosos de devolver a la comunidad. Apoyamos la abundante vida marina del atolón Baa a través de nuestra asociación con Olive Ridley Project y Manta Trust. Por ejemplo, cada vez que encontramos tortugas heridas en las redes fantasma, las enviamos al Olive Ridley Project para su tratamiento y rehabilitación, hasta que puedan ser liberadas”.

Además, han desarrollado una exitosa relación comercial con los pescadores de la isla de Hithadoo; siendo los encargados de suministrar sus capturas recientes y frescas al hotel de manera regular, y apoyando el talento local mediante la contratación de músicos de la zona para diversos eventos.

La playa paradisíaca de Seaside Finolhu
En Finolhu se puede disfrutar del lujo de manera sostenible y con compromiso medioambiental. Foto: Finolhu.

Finolhu también contribuye a limpiar y preservar la isla para las generaciones futuras y, al mismo tiempo, lleva a cabo interesantes intercambios culturales, ya que son actividades a las que se pueden sumar los huéspedes interesados por la sostenibilidad, participando como voluntarios.

Por qué Finolhu

Los huéspedes del hotel Finolhu podrán disfrutar de un lugar de ensueño, lleno de calma y sosiego, con su propia villa, y rodeados de una atención totalmente personalizada, mientras tienen la oportunidad de practicar esnórquel por la mañana u observar tortugas y los colores de los corales por la tarde… En Finolhu vivirá en el límite de un mundo muy particular: el mar es el hábitat natural más grande del mundo.