La existencia de Blancpain se remonta a 1735. Aunque comenzó como un pequeño taller de relojería, pronto destacó por encima de sus competidores por una serie de innovaciones. Esa misma filosofía conserva en la actualidad. Es conocida por varios modelos icónicos, incluido el Blancpain Fifty Fathoms, que en 1953 se convirtió en uno de los primeros relojes de buceo automáticos de la historia. Ahora, este modelo vuelve a lanzarse reinterpretado por Swatch. Su éxito ha sido inmediato: como si de un concierto de una estrella del pop se tratase, las tiendas de la firma suiza de Madrid, Valencia y Barcelona registraron colas para comprar el reloj Blancpain x Swatch.

El reloj original, desarrollado en colaboración con la Marina Francesa, se convirtió en un estándar para los buceadores, tanto de manera profesional, por ejemplo, para la NAVY Seal de la Armada americana, como para aficionados al submarinismo. El nombre Fifty Fathoms se refiere a la capacidad del reloj para resistir una profundidad de 50 brazas, que equivale aproximadamente a unos 91 metros (300 pies). Cuenta con una caja de acero inoxidable, una esfera legible y un bisel giratorio unidireccional, que es una característica esencial para los relojes de buceo, ya que permite medir el tiempo transcurrido bajo el agua de manera segura.

de los océanos, la correa está fabricada con redes de pesca recicladas extraídas del mar.
A lo largo de los años, Blancpain ha lanzado varias ediciones especiales del Fifty Fathoms para conmemorar eventos importantes o colaboraciones especiales. Pero nunca se había unido a Swatch, pese a que Blancpain fue adquirida por la relojera suiza en 1992. Se ha mantenido como una marca independiente, y ahora se unen para reinventar el pasado con el Bioceramic Scuba Fifty Fathoms, 70 años después del lanzamiento del original.

En este nuevo modelo, destaca el movimiento automático de Swatch, el System51, el único producido de forma industrial de todo el mercado. Está compuesto por 51 piezas, de ahí el nombre, a diferencia de los relojes de este tipo que integran el doble. Algunos modelos de alta gama, incluso, superan las 600 que los maestros relojeros ensamblan a mano durante varias semanas.

El movimiento puede verse a través del fondo transparente de la caja, decorando el rotor con motivos y animales marinos, como el nudibranquio. Los cinco océanos del mundo dan nombre a sendos modelos de Blancpain x Swatch: Arctic Ocean, Pacific Ocean, Atlantic Ocean, Indian Ocean y Antarctic Ocean.

Cada reloj de esta colección no limitada cuesta 390 euros, un precio muy alejado de los 15.000 euros que puede costar el original. Hace apenas un año, Swatch se unió a otra marca del Grupo Swatch, Omega, en una colaboración sin precedentes que también provocó largas colas en las tiendas españolas, al igual que ha ocurrido ahora con Blancpain. Juntas desarrollaron el modelo Moonswatch, una reinterpretación del Omega Speedmaster Moonwatch, que puede llegar a alcanzar los 60.000 euros, frente a los 260 euros del Moonswatch. Con este lanzamiento, el Omega Speedmaster Moonwatch original aumentó sus ventas un 50%, según desveló Nick Hayek, consejero delegado del Grupo Swatch.

El modelo creado entre Swatch y Blancpain constituye el noveno reloj de la colección Scuba, donde se encuentran éxitos como el Scuba 200, el Aquachrono 200 y Aquachrono Midsize, el Irony Scuba, el Irony Scuba 200, el Swatch Irony Scuba 200 Chrono, el Fun Scuba, el Swatch Scuba Libre y, finalmente, el Bioceramic Scuba Fifty Fathoms.
El reloj únicamente se encuentra disponible en tiendas físicas de Swatch seleccionadas. La colección no es limitada, pero solo se permite adquirir un reloj por persona, día y tienda.



