El Petersen Automotive Museum, museo automovilístico situado en el Wilshire Boulevard, un aclamado barrio de Los Ángeles, presenta la exposición Electric Revolutionaries (Revolucionarios Eléctricos) en la Galería de la Familia Richard Varner.
Una colección con más de 25 motocicletas eléctricas personalizadas, y producida por la Motor/Cycle Arts Foundation y Sasha Tcherevkoff con el apoyo de LiveWire, rinde homenaje a una docena de pioneros de la escena de los vehículos eléctricos, y hace hincapié en los artistas que trabajan las dos ruedas. Una fusión de arte y tecnología en la que se habla de historias, objetos efímeros, prototipos y equipos influyentes que forjaron el camino para la inclusión de los vehículos eléctricos.

Comisariada por el cofundador de la MotorCycle Arts Foundation, Paul d’Orleans, se trata de la continuación de la primera exposición de motos eléctricas que el museo realizó en 2019. “Estoy muy emocionado de reunir esta colección salvajemente diversa de pioneros de los vehículos eléctricos. Electric Revolutionaries representa el interés por un futuro eléctrico, desde un humilde adolescente de Ghana que fabrica vehículos eléctricos a partir de chatarra, hasta genios artesanos que construyen diseños conceptuales y vanguardistas, pasando por demonios de la velocidad y diseñadores superestrellas mundiales interesados en llevar la movilidad a la zona verde”, confiesa d’Orleans.
La galería, que actualmente cuenta con otras exposiciones como Bond en movimiento –una colección oficial de los vehículos originales del agente más aclamado del séptimo arte– pretende poner de manifiesto los avances realizados en este campo en los últimos tres años.

Visión de futuro y creaciones electrificadas
El director ejecutivo del Museo del Automóvil de Petersen, Terry L. Karges, asegura que este proyecto ofrece una mirada única y cercana a las máquinas innovadoras y a los creadores que están detrás de ellas. “El detalle, el nivel de artesanía y el pensamiento poco ortodoxo que hay detrás de estas motocicletas eléctricas las convierten en visitas obligadas”, añade.
A pesar de las inversiones millonarias destinadas a proyectos que favorezcan la fabricación de vehículos eléctricos, el porcentaje que circula por las carreteras sigue siendo reducido. En el mundo de las motocicletas la cifra es aún más reducida: sólo un gran fabricante ofrece a día de hoy una e-Moto de tamaño completo: Harley-Davidson, a través de su división LiveWire.

Cada uno de estos productos revolucionarios aporta una contribución única a este espacio emergente de vehículos eléctricos que apuestan por la sostenibilidad y el medio ambiente. Los diseñadores abordan una serie de cuestiones diferentes, abrazando así lo que podría ser el futuro de la movilidad.
Dentro de las variedades que encontraremos, destaca Eva Häkansson, quien diseñó la primera motocicleta eléctrica matriculada en Suecia, la ElectroCat; el adolescente ghanés Samuel Aboagye, quien construyó Solar Scooter y Solar Rickshaw utilizando únicamente materiales recuperados, desechados y reciclados que pudo conseguir de forma gratuita.

Encontramos además la Nomoto de Joey Ruiter, que se camufla como mobiliario urbano utilitario, o Rontu, del famoso diseñador de motocicletas Walt Siegl, que utiliza fibra de carbono, aluminio y la ausencia de paneles en la carrocería para contribuir a su escaso peso de 100 libras… o la vanguardista y premiada XP Zero de Hugo Eccles; una reinterpretación radical de una ZERO SR/F.
También llama la atención el diseño de The One de Curtiss Motors. Conceptualizado por JT Nesbitt, presenta un diseño retrofuturista y una calidad de construcción que sólo suele encontrarse en los hipercoches.

En definitiva, y si algo tienen en común es que todos ellos desafían las ideas que rondan en nuestra cabeza sobre qué es un coche o una moto. Electric Revolutionaries, ya abierta al público, estará disponible hasta el 26 de febrero de 2023.