La popularidad de las duchas se ha acrecentado en las últimas décadas debido a factores como el consumo de agua o la falta de espacio. Además, la rutina nos engulle y, por falta de tiempo, disfrutar de un buen baño relajante a diario resulta complicado. Por todo esto, las bañeras están en desuso. Parecen haber quedado reducidas a los hoteles, aunque aún tengan presencia en muchas casas.
Pese a que tienden a desaparecer de los cuartos de baño sigue habiendo “defensores” de la bañera para cuidarse o darse un placer, solos o en compañía, con aceites esenciales o sales, con una copa de vino o un buen libro en la mano… ¿Por qué renunciar a este hábito tan saludable para combatir el estrés?
La firma Jacob Delafon brinda la posibilidad de optar por cualquiera de las dos opciones. Para una ducha rápida su nueva propuesta se llama Flight Pure, un plato de una sola pieza con calidad de la gama alta. Una de las características más destacadas es su revestimiento antideslizante, que aporta seguridad y previene cualquier accidente o resbalón. Esto es especialmente importante sobre todo cuando se comparte el espacio con niños o personas mayores. Además, el tratamiento antibacteriano incorporado en su superficie asegura una higiene óptima y una sensación de limpieza duradera.
Otro aspecto a destacar es su superficie cálida al tacto, la cual proporciona una agradable sensación de calor al entrar en contacto con la piel. Su estética minimalista agrega un toque de modernidad al cuarto de baño. Destaca, además, su fácil limpieza, que se traduce en ser una opción cómoda y práctica (con el atractivo del diseño de gama alta).
No obstante, si el tiempo no lo impide, tal vez prefiera convertir este espacio de la casa en un spa para el cuidado personal y desconectar de todo. En ese caso, la bañera será su mejor aliada. Después de una larga jornada, sumergirse en el agua caliente, rodeado de burbujas, dejando que las tensiones se desvanezcan. Es el lugar perfecto para cargarse de energía con una buena dosis de bienestar y tranquilidad.
Para esa desconexión total que a veces uno reclama a gritos, Jacob Delafon ha lanzado la bañera acrílica semi-isla Rêve. Su diseño transforma el cuarto de baño en un auténtico oasis de relax. Esta pieza ha sido cuidadosamente diseñada para brindar el máximo confort y comodidad. Para conseguir ese remanso de paz, la firma francesa ha diseñado la bañera con un acabado premium y doble respaldo ergonómico. De esta manera, es posible olvidarse del ajetreo diario y cuidarse a uno mismo. Rêve acoge al usuario para proporcionar sensaciones placenteras en la intimidad del hogar, convirtiendo cada sesión wellness en un momento especial y rejuvenecedor.
Además de diseño, funcionalidad y materiales de gran calidad, tanto Flight Pure como Rêve lo ponen muy fácil a la hora de la instalación. Los platos de ducha están fabricados en acrílico reforzado con carga mineral, lo que garantiza su resistencia y estabilidad. Las bañeras se fabrican con ese mismo componente de primer nivel que proporciona un acabado suave y resistente.
En definitiva, la elección entre ducha y bañera es una decisión que se ajusta a las necesidades y deseos de cada uno. Ambas opciones tienen sus encantos y beneficios, y ambas pueden adaptarse a diferentes momentos de la vida. Siendo la ducha práctica y rápida, y la bañera, un placer relajante, cada una te ofrece una experiencia distinta.
