La Fundación Valentín de Madariaga y Oya celebra su 20 aniversario

Patrimonio

La Fundación Valentín de Madariaga y Oya celebra su 20 aniversario

Con este motivo, el 23 de mayo se inaugura en su sede la exposición de su colección de arte privada dedicada a la naturaleza.

Ingeniero industrial, empresario y cazador. Valentín de Madariaga y Oya (Vigo, 22 de junio de 1930 – Sevilla, 15 de noviembre de 2002) fue un personaje interesado en todos los ámbitos de la cultura y el emprendimiento que dejó tras de sí un gran legado. Como empresario, creó la primera consultora nacional abierta en España y fundó el Grupo MP, dedicado a la fabricación de ascensores actualmente presente en los cinco continentes. Como cazador, realizó casi 200 safaris, reunió la colección de caza mayor más importante del mundo con más de 350 especies distintas y se convirtió en el primer español en ganar el premio Weatherby en 1977, el equivalente al Nobel en el ámbito cinegético y del conservacionismo.

En la imagen superior, la fachada de la sede sevillana (Paseo de las Delicias, 7, 41013 Sevilla). Sobre estas líneas Valentín de Madariaga, presidente de la Fundación, en el jardín de la sede junto a una escultura de arte outsider que representa un tiburón.

Un año después de su fallecimiento, en 2003, sus hijos fundaron la Fundación Valentín de Madariaga y Oya, FVMO, para mantener vivos su memoria y su legado. La organización, que cumple 20 años, está ubicada en Sevilla, en el edificio histórico que acogió el Pabellón de EE. UU. en la Exposición Iberoamericana de 1929. Será allí donde el próximo 23 de mayo se inaugure una gran exposición para celebrar estas dos primeras décadas, durante las cuales bajo la dirección de Valentín de Madariaga, arquitecto y director de la Fundación, ha reunido un importante patrimonio artístico. “En mayo hacemos una exposición con una nueva edición de obras de la colección-homenaje a nuestro padre, dedicada al medioambiente y a la naturaleza”, explica.

El principal protagonista de la exposición es el Land Art de los años 50 hasta nuestros días, con obras de artistas que han creado para, por y con la naturaleza. Pero también hace una clara apuesta por el arte contemporáneo, la arquitectura y la fotografía, reuniendo obras de Joseph Beuys, Andy Warhol, Olafur Eliasson y Cristina Iglesias, entre muchos otros.

Tras la concesión, en 2006, del antiguo pabellón de Estados Unidos construido para la Exposición Universal de 1929 por parte del Ayuntamiento de Sevilla, la Fundación reacondicionó la planta baja como Centro de Arte Contemporáneo, convirtiéndose en el primero de la capital andaluza. Desde entonces ha acogido más de 80 exposiciones y a 300 artistas de índole nacional e internacional. Cada año, una media de 20.000 visitantes traspasan sus puertas, por lo que se ha consolidado como uno de los núcleos culturales de Sevilla.

Valentín de Madariaga, además, es un ávido coleccionista de arte outsider. “Desde hace años colecciono y me apasiona el arte creado por personas discapacitadas que son verdaderos ángeles, que crean en libertad y que no tienen ningún tabú ni ningún complejo para representar lo que ellos piensan o quieren. Nadie les comisiona y las obras que salen suelen ser algunas muy duras, pero la mayoría maravillosas”.

Una de las aulas de la FVMO donde se desarrolla el Proyecto Emprendimiento, que entre otras colaboraciones, mantiene dos líneas de actuación principales: Curious Mind, para la formación de emprendedores, y Discovering Future Minds, dirigido a profesores de Secundaria, Formación Profesional y Bachillerato.

FVMO desempeña también una labor crucial en el ámbito de la formación y el emprendimiento de las personas con discapacidad. Lo hace por medio de dos empresas: SIES, la primera de ellas, es un centro de empleo que ha ayudado a más de 600 personas con todo tipo de discapacidades a integrarse en el mercado laboral. “Los llevamos a hospitales, supermercados, gasolineras…, distintos lugares donde ellos puedan trabajar y realizar su sueño de ser como los demás”, explica Valentín de Madariaga. La otra es DISTRA, un proyecto de inclusión social y laboral que ayuda a personas con autismo o parálisis cerebral cuando terminan su etapa escolar. “No había ningún sitio donde se les ayudara a incorporarse en el mercado laboral y a ser autosuficientes. Nosotros hemos conseguido, con unos cursos de dos o tres años, dependiendo de la capacidad de cada uno, poderlos integrar en Cruz Campo, Pineda…, donde son muy bien recibidos y felices”.

Además de la exposición, la Fundación ha anunciado para el próximo 22 de junio –fecha en la que Valentín de Madariaga y Oya celebraría su 93 cumpleaños– la primera edición de lo que serán unos galardones quinquenales. Con el Premio al Emprendimiento Empresarial, el Premio al Emprendimiento Cultural y el Premio al Emprendimiento Social, se pretende rendir homenaje a tres personalidades que desarrollen una labor excepcional en los distintos ámbitos a los que se dedica la organización y agradecer de esta manera su compromiso y apoyo.

1 / 6“Celosía”, Cristina Iglesias, 1997. Escultura de madera tallada, resina y polvo de bronce.

2 / 6“La rivoluzione siamo noi”, Joseph Beuys, 1972. Impresión por transferencia sobre papel montada sobre tabla.

3 / 6“Untitled (from de Canary Island Series)”, Olafur Eliasson, 1998.

4 / 6“The cartographic series III”, Olafur Eliasson, 2004. Fotograbado sobre papel Hahnemühle Bütten 400 gr.

5 / 6“El Vesubio”, Andy Warhol, 1985. Serigrafía, papel en tinta de color.

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