En 1856, Thomas Burberry (Surrey, Reino Unido, 27 de agosto de 1835 – Hook, Reino Unido, 4 de abril de 1926) estableció la firma que lleva su nombre en 1856, a la temprana edad de 21 años. Desde entonces, la marca ha crecido y se ha expandido a nivel internacional, convirtiéndose en una de las multinacionales de moda y estilo de vida más reconocidas y admiradas del mundo.
Su popularidad comenzó a crecer a partir de la década de 1880, tras la aparición de la gabardina. La ropa de lluvia del siglo XIX era pesada, rígida e incómoda, pero esta prenda de algodón impermeable y respirable ideada por Burberry resultó ser perfecta para afrontar el clima británico y sus constantes lluvias. Tanto fue así que la British War Office encargó a la marca diseñar un abrigo para sustituir su uniforme militar en la Primera Guerra Mundial. Entre 1914 y 1918 la gabardina fue utilizada por los soldados en las trincheras, bautizándose como trench coat (“abrigo de trinchera” en inglés).
Son muchas las referencias militares que acabaron por infiltrarse en la vestimenta masculina y femenina tras la Gran Guerra. “Burberry nunca se fundó como una empresa de moda. Se trataba de algo práctico, funcional y de alto diseño”, dice Christopher Bailey, director creativo de la marca de 2001 a 2018. En 1965, uno de cada cinco abrigos exportados desde Gran Bretaña eran de la casa.
Otros episodios significativos de su historia, como el diseño de su logotipo en 1901, la concepción de su emblemático motivo a cuadros en los años 20 –bautizado como check– o su designación como proveedor real por la reina Isabel II en 1955 están recogidos con todo detalle en el libro.
Burberry ha sido publicado por Assouline y escrito por Alexander Fury (Inglaterra, 15 de diciembre de 1982), director de artículos de moda en AnOther Magazine y crítico de ropa masculina. En obras anteriores ha escrito sobre otras marcas de lujo como Dior, Chanel y Montblanc.
La obra cuenta con un prólogo de Carly Eck, conservadora del archivo de la marca, quien lo define como “material para leyendas”. “Burberry es una historia de creatividad, exploración, innovación y comunidad, cosas que siguen estando en el corazón de la marca. Al desenterrar un tesoro escondido, se han descubierto innumerables pepitas de oro. Este libro, el único avalado por la compañía en los últimos tiempos, presenta un panorama del extraordinario patrimonio de la empresa, que merece ser ampliamente celebrado”, afirma.
Cada uno de sus cinco capítulos explora el legado, la artesanía y los acontecimientos que han marcado un antes y un después en la casa de moda británica por excelencia. La obra, compuesta por 252 páginas, incluye más de 200 ilustraciones obtenidas de los archivos de la marca y otras fuentes.
Está disponible desde el 28 de marzo en tiendas Burberry y Assouline por 195 euros.
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1 / 6Parte trasera de la caja que envuelve la obra. Dimensiones: 27,8 cm de ancho por 35,4 cm de alto y 4,5 cm de grosor. Peso: 3,6 kg.
2 / 6El libro presenta los cuadros ‘check’ tan característicos de la marca.
3 / 6A la izquierda, ilustración de un hombre con traje de explorador diseñado por Burberry en los años 20. En la página contigua se puede leer: “La casa se convirtió en sinónimo de vestir a los intrépidos y aviadores que empujaban los logros de la humanidad”. Páginas 180 y 181.
4 / 6Vestido de baile de la colección otoño/invierno 2022 de Ricciardo Tisci. Se hace eco de la obra del angloamericano Charles James, con su falda amplia y su corpiño ajustado. La singularidad de la prenda radica en su confección y sus detalles, que utilizan la gabardina característica de Burberry y elementos extraídos de la anatomía del ‘trench coat’, como las solapas de las pistolas, los bolsillos para tormentas y el cinturón con anillas. Páginas 105 y 106.
5 / 6La modelo británica Adwoa Aboah y su familia posa durante la campaña de la colección otoño/invierno 2018. Fotografiadas por Juergen Teller en Ghana. Páginas 138 y 139.
6 / 6La bufanda ‘Burberry Classic Check Cahsmere’ en el taller escocés, con 200 años de antigüedad. Algunos procesos se realizan a mano y otros con maquinaria tradicional. Páginas 244 y 245.