La silla premiada de Actiu

Diseño

La silla premiada de Actiu

El fabricante español fue protagonista en los German Design Awards por “Bee”, diseñada por su fundador e inspirada en la naturaleza.

Cuando el televisor comenzaba a hacerse un hueco en los hogares españoles en los años 60’, la gente no tenía un lugar específico donde colocarlo, por lo que solía acabar encima de la mesa del comedor o sobre una silla. Pero donde algunos veían una incomodidad, un joven alicantino vio una oportunidad: la de crear el primer mueble pensado únicamente para alojar el revolucionario aparato.

Ese fue el primer gran logro de Vicente Berbegal, pero no el único: En 2016 se convirtió en el primer español en ser declarado Empresario del Año por los European Business Awards. Originario de Castalla, Alicante, comenzó a trabajar en un taller de carpintería hasta 1968, cuando a la edad de 20 años decidió crear su propia empresa de muebles. Creaciones Berbegal creció rápidamente durante las décadas de 1980 y 1990, primero por España y poco a poco abriéndose camino en los mercados de Francia, Alemania y Reino Unido. Con el rápido avance de la informática dio un salto del sector del hogar a la fabricación de muebles para oficinas y, antes de pasar al nuevo milenio, cambió su nombre a Actiu.

Ha pasado más de medio siglo desde que Berbegal comenzó a diseñar muebles y más de 35 años desde que produjo las primeras sillas de oficina. Hoy, Actiu está presente en casi un centenar de países y cuenta con salas de exposición en ciudades como Madrid, París, Londres y Miami. El último diseño en llegar a las showrooms de la marca es la silla Bee, concebida por el propio fundador e inspirada en la naturaleza.

En la imagen superior, la silla Bee en sus versiones de color verde y coral. Sobre estas líneas, su forma contemporánea y un sutil acabado visón hacen que encaje con la estética cuidada de un restaurante.

Esta silla busca conjugar formas y volúmenes para transmitir una delicadeza tan icónica como sorprendente. Según las leyes de la aerodinámica, el vuelo de una abeja no debería ser posible debido a las pequeñas dimensiones de sus alas en relación con su cuerpo. Aun así, estos insectos consiguen volar. “Bee es una pieza inspirada en la naturaleza, principalmente de las abejas. No sólo por su morfología sino por su capacidad de creación de espacios para su hábitat. Incluye innovación, ciencia de los materiales y sostenibilidad en procesos en una icónica silueta”, explica Berbegal.

Al igual que nuestras delicadas amigas voladoras, el carácter versátil de la silla Bee le permite adaptarse a cualquier espacio. Desde un hogar hasta una oficina, encaja tanto en interiores como exteriores y es capaz de funcionar como silla individual en habitaciones de hotel, como confidente en despachos o a nivel colectivo en salas de reunión o auditorios.Ofrece un diseño único y compacto sin aristas ni uniones, que le valió a Actiu una Mención Especial del Jurado en la última edición de los German Design Awards, en la categoría de Diseño de Producto Excelente – Mobiliario.

Está fabricada en polipropileno con un 30% de fibra de vidrio e inyección de gas. Este proceso le proporciona una gran durabilidad al tiempo que reduce el peso considerablemente, lo que facilita su transporte y permite apilar hasta un número de cinco piezas. Así mismo, cuenta con antioxidantes que evitan la descomposición del material, estabilizantes para aumentar su vida útil y tratamiento anti UV para uso exterior.

La silla en acabado negro posee un teñido de alta adherencia para uso exterior aplicado mediante un proceso de imprimación y lacado que garantiza la máxima calidad visual y resistencia.

Bee se ofrece en una gama de seis colores que inlcuyen blanco, negro, gris, visón, verde y coral. Cada pieza está disponible a partir de 100 euros en distribuidores oficiales de Actiu.